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Vamos a probar una nueva experiencia: «Un blog a cuatro manos». Aunque suena algo menos que regular, puede que sea el momento justo para iniciar un nuevo camino dentro de la opinión y dar testimonio desde la Red de redes, pues ya estamos hartos de filósofos de barra fija y gasolina espumosa.

Así, durante un espacio no determinado de tiempo, escribiremos todo lo que se nos apetezca, TODO, aunque no podamos disimular que nuestras inquietudes profesionales giran en torno al e-periodismo, Internet y la tecnología.

Quizá el nombre, si habéis prestado atención a la portada, no requiera más explicaciones, pero como nos gusta escribir mucho, os contamos que la palabra blog alude a la bitácora, ese cuaderno o diario de abordo de los navegantes, que al entrar en el maremagnun virtual ha adquirido dicha denominación.

Para el «41» existen dos explicaciones. Blanco, que es un hombre pragmático y despierto, afirma tajantemente que esas dos cifras aluden a nuestro lugar de nacimiento, Sevilla, y son el principio de nuestro código postal. Benítez, por su parte, prefiere darle un tono más místico e icónico, y está prácticamente convencido de que significa «cuatro manos y un blog».

Seguramente ninguno de los dos lleva razón.

Blanco&Bení­tez (B&B), irresponsables posteadores de blog41.